¡Hola amigos y amigas del mundo! Vamos a ver hoy una receta bien latinoamericana originaria y típica de Chile. El charquicán es un guiso chileno tradicional y reconfortante.
La preparación varía según las regiones y preferencias familiares. Para hacerlo, se hierve la carne hasta que esté bien tierna y se agrega el charqui si es la preferencia de los comensales o el cocinero. Además lleva verduras así que es muy completo.
Se sirve generalmente como plato principal y refleja la rica tradición culinaria chilena. Como todo guisado lleva su tiempo la preparación previa pero después es solo dejar que el fuego lento haga lo suyo.
El charquicán es un plato chileno emblemático que fusiona ingredientes locales en un guiso sabroso y reconfortante. Su origen se remonta a la época colonial, cuando se utilizaba charqui (carne deshidratada) para preservar la carne.
La receta varía, pero comúnmente incluye carne de res, papas, zanahorias, choclo, calabacín, cebolla, ajo y comino. La versatilidad permite adaptarlo a preferencias personales.
Algunas recetas incluyen ingredientes adicionales como pimiento y guisantes. Este plato es una expresión culinaria arraigada en la cultura chilena, servido caliente como plato principal, destacando la riqueza de los productos locales y la creatividad en la cocina.
Preparar charquicán, un plato chileno tradicional, implica combinar ingredientes simples para lograr un guiso sabroso y reconfortante. En primer lugar, se hierve carne de res hasta que esté tierna, y opcionalmente se añade charqui para potenciar el sabor.
Luego, se incorporan papas, zanahorias, choclo, calabacín, cebolla y ajo, todo cortado en trozos. La mezcla se cocina hasta que las verduras estén suaves, permitiendo que los sabores se fusionen.
La versatilidad de esta receta permite adaptarla según las preferencias, resultando en un plato casero lleno de tradición y calidez. Suele acompañarse con huevos fritos por encima como en la receta de huevos rancheros o huevos duros en mitades.
El charquicán de verduras es una variante vegetariana del plato chileno clásico, destacando la abundancia de vegetales frescos en su preparación. Este guiso prescinde de la carne, centrándose en ingredientes como papas, zanahorias, choclo, calabacín, cebolla y ajo, todos cortados en trozos generosos.
La ausencia de carne resalta los sabores naturales de las verduras, creando un plato ligero y nutritivo. El comino sigue siendo un elemento clave para proporcionar ese toque distintivo.
La receta con verduras es una opción deliciosa y saludable que celebra la diversidad de productos vegetales, manteniendo la esencia reconfortante de esta receta tradicional chilena.
La palabra “charquicán” tiene su origen en el quechua, una lengua indígena sudamericana. Proviene de la combinación de dos términos: “charqui”, que se refiere a la carne deshidratada y preservada, y “can”, que significa potaje o guiso.
En conjunto, alude a un guiso que tradicionalmente incorpora charqui, pero con el tiempo, la receta evolucionó para incluir diversos ingredientes como carne fresca, papas, zanahorias y otras verduras. Esta adaptabilidad refleja la riqueza cultural de la gastronomía chilena, fusionando elementos indígenas y coloniales en un plato reconfortante y sabroso.
El charquicán tiene raíces en la época colonial de Chile y su nombre proviene del quechua, lengua indígena sudamericana. Originalmente, se preparaba con carne deshidratada y preservada, una técnica utilizada para conservar alimentos.
Con el tiempo, la receta evolucionó, incorporando carne fresca y una variedad de verduras locales. Este plato representa la fusión de influencias indígenas y coloniales en la gastronomía chilena, destacando la adaptabilidad de la receta a través de los siglos. Se ha convertido en un ícono culinario que refleja la rica historia y diversidad de Chile.
Seguime en Instagram (acá)
Y en YouTube que subo vídeos nuevos todas las semanas (clic acá)
Rinde: 6 porciones
Tiempo de preparación: 40 minutos